Según ACNUR, entre 200.000 y 400.000 murieron, algunos a manos de despiadados piratas. Para un Partido Comunista que derrotó el poderío militar de los Estados Unidos en ese momento y recientemente presidió un crecimiento económico espectacular, este es un evento que le gustaría olvidar. El Oscar de Ke Huy Quan lo trae todo de vuelta.